La entrada en la adultez mayor —considerada así por la OMS— supone una nueva etapa en la vida. La principal novedad es el proceso de declive metabólico, que, si bien nos acompaña siempre, se acelera significativamente. Por tal razón, resulta imprescindible que conozcas las características del envejecimiento y la importancia de la actividad.
Las características del envejecimiento en seis claves
¿Cuáles son las necesidades básicas del adulto mayor? Los especialistas han identificado tres claves para después de los 60 años, especialmente, tras la jubilación. La primera de ellas es el acompañamiento y la asistencia para evitar la soledad. La segunda, por su parte, se basa en el cuidado de la percepción y la tercera se corresponde con atención constante. Contamos con 6 claves principales que ayudan a identificar las primeras características del envejecimiento en personas mayores.
Ritmo de actividad más pausado
Durante décadas, los estudios siempre han demostrado una conclusión básica. El ritmo de actividad se reduce de manera heterogénea y progresiva, con una incidencia más marcada al alcanzar los 70 años. El desgaste óseo y muscular, unido al miedo a perder la estabilidad, hacen que ciertas actividades se dejen de realizar.
Otro de los factores que se perciben es el adelgazamiento, que contribuye a una sensación de debilidad más notoria. Cuando se alcanzan los 80 años (90, en algunos casos), este fenómeno va cada vez más acompañado de un aumento en la dependencia. La realización de tareas diarias, como el aseo personal o cocinar, se va dificultando.
Problemas en el sistema excretor
El sistema excretor es el encargado de eliminar los residuos del organismo. Con el paso de los años, se va deteriorando en una acción que se percibe en distintos órganos a la vez. Los riñones, por ejemplo, ya no son capaces de filtrar el exceso de agua con la misma eficacia. De igual modo, surgen problemas de incontinencias.
Esta situación no solo la podemos percibir en el plano físico, también en el mental. Como te podrás imaginar, los adultos mayores tienden a acomplejarse al empezar a usar pañal. El acompañamiento y el entendimiento a través del diálogo parecen ser las mejores soluciones para evitar un impacto psicológico más negativo.
Cambios en las necesidades metabólicas
La metabolización de nutrientes sufre un cambio muy considerable. La causa directa es la menor necesidad de energía del organismo, que se traduce en un aprovechamiento menor de los alimentos. Las personas de la tercera edad tienden a comer menos, pero también a dormir una menor cantidad de horas (unas 6 o 7 de media).
Hay que prestar atención a que, si bien se presenta en un menor volumen, el régimen nutricional siga siendo variado. Cuando viven solos, los ancianos suelen descuidar la elaboración de comidas. Por tal razón, la asistencia es primordial para controlar que mantengan pautas básicas y lleven una dieta equilibrada.
Envejecimiento celular
El envejecimiento celular se puede definir como la degeneración de los tejidos. La muerte celular es un proceso irreversible cuando la regeneración de las capas dérmicas inicia un proceso de ralentización. El efecto más visible, como bien sabrás, se produce en la piel de la cara, que tiende a presentar más arrugas.
Sin embargo, desde el punto de vista funcional también podemos identificar otro impacto. Como las células no albergan la misma cantidad de ácido hialurónico, no son capaces de absorber líquidos. Por tanto, se puede padecer sequedad o retención de líquidos, lo que produce una pérdida de movilidad en las articulaciones.
Limitaciones sexuales y sociales considerables
La pérdida del apetito sexual se presenta, comúnmente, a los 50-60 años. Sin embargo, se agudiza hasta ser completa alrededor de los 70 años. Según los expertos, este es uno de los factores en el que más influyen las consideraciones sociales. El envejecimiento activo implica, entre otras circunstancias, saber valorar el cuerpo y disfrutarlo.
Las limitaciones sociales son, por otro lado, uno de los factores que debemos contribuir a mitigar. Hay que procurar, con independencia de esta circunstancia, que la persona pueda seguir manteniendo una vida social. El acompañamiento de amigos y familia resulta imprescindible durante la adultez mayor.
Distinta autopercepción
Los cambios en la autopercepción son, quizá, uno de los aspectos que más puede desencadenar enfermedades. La pérdida de audición deriva en un serio aislamiento, mientras que el uso de ayudas para caminar como bastones o andadores producen complejos. La falsa sensación de dejar de ser útil, por su parte, es otro de los aspectos que más daño emocional causan.
Nuestro consejo es que prestes atención a conocer e identificar obsesiones en ancianos. Las manías persecutorias o la agresividad súbita pueden ser síntoma de demencia o alzheimer. Estas circunstancias no se pueden revertir, pero sí es posible lograr un desarrollo mucho más lento si se detectan y tratan a tiempo.
Qué es el envejecimiento activo: una nueva oportunidad
Con la entrada en la tercera edad, el impacto físico y psicológico produce consecuencias que pueden ser irreversibles. Una caída que ocasiona una fractura o la depresión pueden ser circunstancias evitables. Con este objetivo, la sociedad ha comenzado a entender qué es el envejecimiento activo, una responsabilidad de hijos y nietos.
La revista El Sevier lo define como un «proceso de optimización de las oportunidades de salud, participación y seguridad». El objetivo, según la misma fuente especializada, es «mejorar la calidad de vida a medida que las personas envejecen». Este es un proceso en el que deben participar instituciones locales, familiares y amigos de la persona.
Hay tres claves que permiten afrontar esta nueva etapa vital de una forma práctica y dinámica:
- El acompañamiento, mediante la combinación de sistemas de asistencia y la presencia de familiares.
- La actividad física, por medio de ejercicios de mantenimiento personalizados a las capacidades.
- El entrenamiento psicológico, a través del sobre cubrimientos y la aceptación de los nuevos cambios.
Mención aparte merece el primer punto, que implica conocer qué es la teleasistencia. Es una oportunidad para optimizar las rutinas diarias de los ancianos. Gracias a un equipamiento tecnológico, pueden avisar en caso de tener una necesidad a un equipo de profesionales. La vigilancia, la orientación y la escucha son otras de las ventajas que posee.
Como has podido ver, las características del envejecimiento son diversas y progresivas. Durante este artículo, hemos intentado plasmar cómo el acompañamiento puede ser una solución para garantizar una mayor calidad de vida. Desde Teleasistencia Vital ofrecemos atención domiciliaria constante por parte de profesionales. ¡Conoce nuestros servicios!